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miércoles, 10 de julio de 2013

No estás perdido en el desierto cuando puedes creer en el oasis.

Nuestra vida si que es extraña...e incomprensible.
Hay días en los cuales brilla el sol, estamos contentos, vemos los aspectos buenos y bonitos de la vida, hacemos bien las cosas, todo el mundo es agradable con nosotros, pero no sabemos realmente el porqué. Nos decimos a nosotros mismos, tal vez es que hemos dormido bien o es que nos encontramos con alguien que nos hizo sentir comprendidos y nos sentimos muy bien, entonces pensamos: así debe continuar este día, con esta paz, con esta alegría....
Pero de repente, todo cambia, sin más ni más.
Así como un sol claro se pone detrás de las nubes, así la tristeza nos cae encima, vemos todo negro, creemos que los demás ya no nos quieren. En cosas tontas e insignificantes buscamos motivos para gruñir , para quejarnos y sobretodo para acusar a los demás....entonces:
también pensamos: tal vez estamos cansados, y que todo seguirá así de mal.
¡Pero porqué tiene que ser así?
Si vivimos en un mundo donde hay días de primavera, días de otoño, existe un flujo y reflujo....días con calor otros con frío.......y
TODO SE REPITE.....SE REPITE......
Pero si llegamos a comprender esto, podremos seguir con coraje y esperanza, porque sabemos que después de cada noche, habrá un nueva mañana.
Cuando lo aceptemos llegaremos a entender esta vida y con ello vendrá la alegría vital que nos mantiene vivos.........
Otra de mis tantas
frases queridas:
Cuando quiero mejorar el mundo pienso lo mejor es empezar conmigo mismo. No estás perdido en el desierto cuando puedes creer en el oasis.

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