Si nos comparamos con los demás, es probable que pensemos que ellos son más capaces, que tienen mejores cualidades y por supuesto que son más felices...
Sin embargo, lo que determina nuestro bienestar y felicidad no es lo que tenemos, sino como nos valoramos...
Si no nos valoramos nos convertimos en nuestros propios enemigos....pues no nos dejará ser felices...
Debemos tener en cuenta que nadie puede hacernos sentir inferiores sin nuestro consentimiento....
Si creemos que para valer y triunfar debemos ser perfectos...y que si las cosas no salen bien, es sólo por culpa nuestra, estamos queriendo ser perfeccionistas....
Y ésto es un gran error, no podemos ir por la vida pretendiendo que todo nos salga bien...
Tenemos que aceptar nuestros errores, no culpar a los demás de ellos ni tampoco criticarnos a nosotros mismos....
Todos y sin distinción, cometemos errores y tenemos malas rachas, la clave no está en lamentarnos sino en sacar l0 mejor de uno mismo y echarle pecho a las situaciones.....
"Todas las pasiones son buenas mientras uno es dueño de ellas, y todas son malas cuando nos esclavizan...."
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